Álvaro Agulla/Verbena Gallega (Síguenos en Facebook)
La verbena sigue siendo el hábito cultural preferido en Galicia. Actualmente se estima que cerca del 70 por ciento de los gallegos (7 de cada 10) asisten al menos una vez al año a estas fiestas, que aúnan cultura, ocio y relación social, además de ser un sector económico del que viven o se benefician unas 50.000 familias.
Hace poco más de una década, en un profundo estudio del investigador Xaime Fandiño ya se recogía que casi un 66 por ciento de la población disfrutaba de alguna verbena cada año. En algunas zonas de la provincia de Pontevedra se llega al 75,5 por ciento, lo que da una idea muy clara de la importancia del sector en Galicia. Actualmente las estimaciones se sitúan en torno al 70 por ciento.
Si lo comparamos con otras alternativas culturales, según diversos estudios, la asistencia al cine se reduce hasta un 44 por ciento, los conciertos al 28 y el teatro al 15. De estas cifras se desprende la importancia social que tiene la verbena, a lo que se suman el empleo y su impacto económico.
No obviemos que la verbena (partiendo de las fiestas parroquiales y extendiéndose por toda la geografía gallega) es una tradición cultural con un enorme arraigo, así como un aspecto fundamental de la identidad y la cohesión social de Galicia, con especial importancia en el medio rural, aunque también ha ido multiplicando su efecto en las áreas urbanas y en las grandes ciudades.
Hablamos de un fenómeno que como lo conocemos aquí es único y llega a contabilizar más de 200 fiestas en un solo fin de semana. No es de extrañar, por tanto, que cerca del 70 por ciento de los gallegos afirmen asistir, al menos, a una verbena cada año.
Mantener y potenciar la verbena como símbolo cultural y social de Galicia, además de un potente polo generador de empleos y dinamización de la economía, es una tarea que nos atañe a todos, en especial a las administraciones.