Verbena Gallega (Síguenos en Facebook)
“Esto es un concurso y lo bueno empieza al acabar”. Esta es la filosofía expresada por Roi Méndez en el programa Operación Triunfo una semana antes de que el público decidiese que tenía que abandonar la Academia, en el transcurso de la Gala 11. En su despedida, el lunes, incidió de nuevo en esta línea, señalando, al ser preguntado por cómo se encontraba, que “hay que relativizar, me voy muy contento”, demostrando, una vez más, su grandeza como persona y como artista.
Ha sido, sin duda, el concursante expulsado más aplaudido por el público del plató, mientras los profesores de la Academia se mostraron “devastados” por el adiós de Roi, tanto por su calidad artística como por haber sido el inquilino que mejor nos lo ha hecho pasar a todos desde el primer día. Su sentido del humor, su espontaneidad y, en especial, la gran amistad que forjó con el resto de concursantes han hecho de él uno de los más queridos de esta edición del concurso, sino el más.
De sus compañeros Roi dijo que “son lo mejor que me ha pasado en la vida”. Al preguntarle qué cosas se lleva de la experiencia, el artista gallego señaló: “Una nueva familia, un montón de aprendizaje, saber valorar las cosas y que los sueños se cumplen siempre”, lo que le valió una gran ovación del público, del jurado, los profesores y el resto de concursantes, en su mayoría emocionados.
El propio presentador del programa, Roberto Leal, que casi nunca hizo algo similar, le dedicó unas palabras muy especiales antes de la despedida. “Me has ayudado mucho en las Galas, me has divertido mucho y has sido súpergeneroso”, dijo, añadiendo que “nos regalaste el momento ‘sapoconcho’, un baile sin venir a cuento en la Gala del otro día…”.
Roi ha demostrado, sin ningún género de duda, que todo lo que toca se convierte en un show, en un espéctaculo, como ya llevaba varios años haciéndolo en la Orquesta Olympus, pero en este caso a lo grande y ante toda España. Ha logrado, como nos tenía acostumbrados en la verbena, poner en pie a todo el público con sus interpretaciones y su puesta en escena; ha trabajado como el que más y se ha esforzado de una forma impresionante cada semana, logrando una evolución magnífica, y se lleva el cariño y la admiración de la gran mayoría de los seguidores de OT.
Se despidió por todo lo alto con su último tema en el concurso y, posteriormente, en el chat, demostrando una vez más quién es Roi Méndez, confesando que cuando era niño compuso una canción para despedir a su frenillo cuando lo operaron de fimosis, lo que desató las carcajadas de todo el mundo. Es más, el tema se titulaba ‘Frenillo corto’ y Roi la entonó con algo así como ‘adiós frenillo corto…’. Los ‘Javis’ se rindieron ante él y le dijeron: “ay Roi, no te vayas nunca”.
Eso era, precisamente, lo que deseábamos todos, pero la realidad es así y en un concurso de este tipo la salida puede producirse en cualquier momento. Roi ya había sido elegido ‘concursante de la semana’ y había sido salvado por el público en dos ocasiones anteriores: una con el 90 por ciento de los votos (algo inaudito e increíble) y la otra con un 73 por ciento. En esta ocasión, la despedida le llegó con el apoyo de un 49 por ciento del público, es decir, la cosa estaba tan dividida que cualquiera de los dos (Roi o Ana Guerra) podrían haber continuado en la Academia.
Lo que ha logrado Roi desde el pasado mes de octubre ha sido realmente impresionante y ha tenido pendiente a toda la verbena y a muchísima gente en Galicia y, poco a poco, también en España. Ha trabajado duro, ha crecido mucho y sale preparado para iniciar lo más importante: una carrera artística que, estamos convencidos, puede llevarle a lo más alto, por su calidad y su carisma sobre el escenario, por su humildad y por su capacidad de trabajar a tope.
Esta no es, por tanto, una despedida. Más bien al contrario, es el punto de partida de una nueva, floreciente y a poco que le acompañe la suerte, exitosa carrera artística. ENHORABUENA!!!
