La Fórmula cierra una temporada espectacular y anuncia fichajes “sorprendentes” para seguir creciendo

Texto y fotos A.M.A./Verbena Gallega (Síguenos en Facebook)

La orquesta La Fórmula acaba de cerrar su primera temporada con los objetivos ampliamente superados tras haber logrado situarse, no sin un enorme esfuerzo en todos los sentidos, entre las grandes formaciones de Galicia. Sin embargo, esto no ha hecho más que empezar, ya que entre el jueves y el viernes de esta semana anunciará la composición de su nueva plantilla, que viene con algunas sorpresas muy importantes y con “un salto hacia arriba en todos os sentidos”, tal como señala el principal responsable de la orquesta, Miguel Caldas.

Aunque guarda celosamente las novedades que se conocerán en las próximas horas, reconoce que “tanto polas fichaxes, como polas expectativas e contratacións cremos que vai ser unha temporada para seguir crecendo dun xeito moi importante”. Asimismo, incide en que ya tienen previstos un buen número de eventos y festivales, que, acompañado del nuevo equipo con el que saldrá al escenario, “é unha combinación moi boa para que poidamos seguir crecendo”.

La formación será renovada aproximadamente en un 50 por ciento de sus componentes, algo que, por una parte, supone un handicap para preparar el nuevo espectáculo, pero, por otra, en las propias palabras de Caldas, “vai supoñer un forte impulso, xa que se trata de fichaxes sorprendentes e de gran calidade”. En esta línea, reconoce que “estamos nun negocio e como en todos cada persoa e cada empresa ten uns obxectivos e unhas expectativas, todas totalmente respetables, polo que se producen estos cambios, pero sempre nun clima de total cordialidade”.

Entre las bajas ya anunciadas destacan las de las dos cantantes femeninas (Maythe Leiva y Sanela Ferizovic) y el masculino Jonathan Tortolero. Si en el primer apartado poco se especula en el mundillo de las orquestas, en el segundo todas las miradas apuntan a uno de los grandes vocalistas de la verbena gallega que recientemente anunció su marcha de la formación en la que estaba, también del grupo de las selectas. El misterio se desvelará en cuestión de horas.

En cuanto a la temporada que ahora termina, Caldas, que evitó confirmar o desmentir ninguno de los nombres que se le puso sobre la mesa para el nuevo equipo, expresó su gran satisfacción por el trabajo de todo el equipo y haber cumplido los objetivos marcados. “Empezamos coa orquestra a finais de abril e o primeiro mes e medio foi moi duro, con moito traballo e coa incertidume que pesaba sobre nós por tratarse dunha formación nova na que había que coordinar a todos os componentes, crear un repertorio desde cero e que este fora o suficientemente amplo como para ir adaptandoo en función de como funcionara nas festas”, explica.

Sin embargo, a medida que fue avanzando el verano “todo foi moi ben, a orquestra gustaba, o escenario e os medios técnicos tamén e as contratacións foron crecendo ata cumprir o obxectivo de superar as 80 actuacións”. En este aspecto, no se puede olvidar que todas las grandes formaciones iniciaron su camino desde abajo, mientras La Fórmula ya nació con la vocación de meterse en el grupo de las mejores desde el primer día: “Contamos cunha infraestrutura moi grande, un equipo moi potente e un risco evidente, que ao final cremos que conseguimos salvar de forma satisfactoria”.

Como ya indicábamos en un reportaje anterior, a lo suyo se le llama llegar y besar el santo. Pero como solemos decir, en esta vida nada es por casualidad. Detrás del gran éxito que logró este verano la orquesta La Fórmula había un enorme trabajo, una inversión extraordinaria y un proyecto musical y artístico muy claro con el que consiguió llegar al público de una forma muy especial, lo que también le valió para que a lo largo de la temporada fuese sumando cada vez más contrataciones, en un mundo muy complicado para arrancar y en un momento muy delicado para el negocio.

Lo cierto es que ha conseguido combinar a muy alto nivel un espectáculo de iluminación y sonido magnífico, con una música y un repertorio amplio y variado dirigido especialmente al baile (sobre todo en el primer pase, ya que el segundo se dedica especialmente a los más jóvenes) y, especialmente, con una puesta en escena muy aplaudida. Demuestra con esto que en absoluto está reñido poner sobre el escenario un gran espectáculo con que el público baile casi desde el principio hasta el final de la actuación.

Como decíamos, La Fórmula nació con el objetivo de convertirse en una de las principales orquestas de Galicia. Lo sorprendente ha sido que lo está consiguiendo mucho más rápido de lo previsto, algo en lo que el enorme esfuerzo y la capacidad de conexión con los asistentes de su cantante principal, Miguel Caldas, supone una parte fundamental.

Caldas, que lleva cantando desde 1996 y ha pasado por formaciones tan importantes como Gran Parada, París de Noia o Filadelfia, no solo es un vocalista con una voz extraordinaria, sino que es el responsable de lograr una perfecta comunión con el público y de convertir cada actuación en lo que es, una auténtica fiesta, cargada de diversión.

La formación cuenta con uno de los escenarios más llamativos y de mayor tamaño de la verbena gallega, con 30 metros de frente, once de fondo y más de diez de altura. Además, su interior está totalmente recubierto con pantallas led de gran calidad y dispone de más de 100.000 watios de sonido.

Estos medios, muy bien aprovechados por los responsables de la orquesta, le han permitido crear una puesta en escena especialmente atractiva, que poco tiene que envidiar a las agrupaciones musicales más importantes de Galicia.

Con este envoltorio y el magnífico equipo artístico y técnico con el que contó esta temporada, La Fórmula se convirtió en la orquesta revelación de la verbena gallega y está situada en una posición inmejorable para mantener este ritmo de crecimiento en cuanto reinicie su actividad.