Blas deja momentáneamente el escenario de París de Noia, aunque anuncia un pronto regreso

Verbena Gallega (Síguenos en Facebook)

Fotos Puxapeón

El incombustible José Antonio Blas Piñón, cantante de la Orquesta París de Noia, y una de las figuras históricas de la verbena gallega, ha tenido que dejar momentáneamente los escenarios debido a un “pequeño percance” del que se está recuperando, tal como ha señalado en un comunicado a través de la página de Facebook de la formación.

En este sentido, añade que “en cuanto me encuentre bien, al cien por cien, volveré a la carga”, lo que supone su deseo firme de recuperar la normalidad profesional cuanto antes. En todo caso, también invita a todos los seguidores y al público en general a “seguir disfrutando mucho de mis compañeros, seguir bailando con París de Noia y que no pare la fiesta!!!”.

“Aprovecho para daros las gracias a todos y cada uno de vosotros por preocuparos por mí. Conseguís que todavía me sienta más querido de lo que normalmente me siento, por lo que esta vez los aplausos son para vosotros. Lo dicho chicos, nos veremos muy pronto y volveré con las pilas bien cargadas. Besos para todos y ‘nos vemos en las fiestas”.

Blas es una de las piezas clave de la Orquesta París de Noia y buena parte de la responsabilidad de su enorme éxito (que cuenta con un elenco de músicos, cantantes, bailarines y técnicos excepcional) es suya, llevándola a convertirse en la mejor orquesta de Galicia desde hace ya algunos años. París y Blas son una sola cosa y no se entenderían por separado. Lleva toda su vida artística (desde que hizo la ‘mili’, según él mismo explica en la web de la orquesta, allá por el año 1981) ligado a esta agrupación. José Antonio Blas Piñón, natural de Redondela, es un amante de la música desde muy pequeño (la familia le animaba a cantar en sus fiestas cuando era niño) y con 15 años ya tenía un grupo.

Es el alma de París de Noia y el público así lo reconoce en cada una de sus actuaciones, ya que existe una comunión total entre ambos. Dirige la verbena, canta, baila y hace que el espectáculo vaya por el camino que mejor conviene cada noche. Lleva 35 años sobre el ‘palco’ de la orquesta y parece dispuesto a seguir adelante mientras pueda hacerlo con la maestría con la que lo ha hecho hasta ahora, en que ha sido y es la gran referencia de las fiestas gallegas.

Ahora le toca tomarse un descanso, que aguardamos sea breve pero todo el necesario para recuperarse al 100 por cien y que regrese con todo su potencial a alegrar cada una de las fiestas en las que participa la orquesta.

Junto a Genma Lareo, Fátima Pego, Sergio Corral y Cibrán Insua forman la delantera de París de Noia, a los que acompaña un amplio abanico de artistas que hacen que centenares o miles de gallegos, depende de la noche, bailen y disfruten en cada verbena en la que actúan. Tienen el valor, además, de haber logrado conectar con un público de abarca a varias generaciones, lo que les garantiza el éxito allá donde son llamados para animar un festejo.

Desde esta página solo podemos sumarnos a los numerosos mensajes de apoyo a Blas y del deseo de una pronta y completa recuperación a nivel personal y profesional, ya que se trata no solo de un cantante y un artista de una calidad excepcional, sino de una grandísima persona.